Hoy sobrevolará esta pregunta en mi participación en el programa de Radio 4G “Llámame Fredy” en el que entro por skype desde hace algunas semanas con Alfredo Arense. Hacer radio siempre ha sido una de mis grandes pasiones (y en otra época mi oficio), y participar de la mano de un maestro como Fredy me hace iniciar los lunes con una emoción distinta.Pero vayamos al grano, ¿se puede trabajar sin jefe?. La pregunta surge por éste artículo que me manda el propio Fredy. Lo Holocracia, que es como se llama la tendencia no es un término nuevo sino que es una tendencia que lleva unos años tomando forma en empresas norteamericanas como Zappos.com, una empresa de 1.500 empleados que se ha convertido en el espejo en el que mirar esta tendencia.
¿En qué consiste?
Más que describir aquí la forma de funcionamiento, que puedes encontrar en este link, me gustaría hablar de las ventajas e inconvenientes que veo. Definitivamente este tipo de organizaciones aportan mayor responsabilidad a las personas, menos burocracia, y se supone que mejores resultados. Al no tener que estar preguntando, consensuando o pidiendo permiso, uno se puede dedicar verdaderamente a resolver los asuntos con su mejor saber y entender. Y eso da autonomía y sensación de logro, lo que a juicio de Dan Pink supone una extraordinaria dosis de motivación. En el fondo, a los directivos nos pagan por dos cosas: por tomar decisiones y por dirigir personas. Si las decisiones son tomadas por las propias personas y éstas pueden ser autodirigidas, ¿para qué se necesita un directivo?
¿Cómo se toman entonces las decisiones que trascienden a la tarea individual y afectan al conjunto?
El sistema lo resuelve diciendo que el mundo funciona sin que haya nadie que te diga cuando tienes que cruzar la calle, nadie al que tengas que pedir opinión sobre si vas hacia el sur o hacia el norte, y que la propia sociedad puede autogestionarse sin necesidad de órdenes permanentes. Ese es el concepto que lleva la Holocracia a las empresas. Y por cierto, el que algunos partidos políticos como Podemos está queriendo implantar en España. El funcionamiento en círculos en los que se proponen mejoras está basado en esta idea de participación colectiva en la solución de problemas.
¿Y quien cuida del valor de los accionistas?
Para mi esa es la pregunta. En todas las empresas que lo están implantando hay unos dueños, y esos dueños tienen unos consejos de administración que se encargan de marcar las líneas estratégicas, y generalmente uno de esos consejeros, el delegado (CEO), es el encargado de que esas líneas estratégicas se conviertan en tácticas por los mandos medios, y en operativas por la línea. En el funcionamiento clásico, las órdenes viajan de arriba abajo, mientras en la Holocracia, no habiendo teóricamente órdenes, las decisiones se toman en los diferentes círculos compuestos por personas de rangos similares. Algunas de ellas pueden estar como enlace en diferentes círculos para coordinar tareas, otras hacen de “secretarios” de las reuniones, y otros aportan conocimientos técnicos allá donde se necesitan.
¿Estaría usted dispuesto a poner su dinero en manos de este tipo de organizaciones?
¿Les dejaría las decisiones sobre cómo enfocar su negocio? No me diga que no hay que tener nervios de acero… Recuerde que si las toma usted, entonces estamos en el esquema clásico… ¿Puede este tipo de organizaciones dejar a los dueños las decisiones estratégicas y delegar en los círculos la forma de resolver? En el fondo es lo que muchos venimos reclamando hace años. Las empresas han de decirte el “qué” ya que el “cómo” lo has de poner tú, es lo que paga tu sueldo. En ese sentido creo que son opciones que conviene explorar, entre otras cosas por que el mundo está cambiando tan deprisa que si queremos tener resultados distintos, hay que hacer cosas distintas. ¡Pruebe! ¡Atrévase! Valore los riesgos y expóngase. Pero no lo ponga todo a un color. Experimente, pero con gaseosa.Excelente semana!!!!
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