Fue un encuentro distendido, con un formato de pregunta de asistentes-respuesta de invitados, arriesgado de gestionar, pero muy atractivo. Digo lo de atractivo no sólo por los invitados: Carlos Moyá y Miguel Bosé. Entre los dos invitados estaba el anfitrión, Emilio Sánchez Vicario. Con Emilio tengo el honor de compartir reuniones del Comité de Estrategia del CSBM en el IESE. Me parece un extraordinario profesional que ha sabido reinventarse, y hacer de la gestión de eventos, instalaciones e instituciones de enseñanza deportiva, una magnífica manera de ganarse la vida ayudando a crecer a otros.
Un viejo Cherokee estaba hablándoles a sus nietos sobre la vida. Les dijo «Hay una batalla teniendo lugar en mi interior… es una pelea terrible entre dos lobos. Un lobo representa el miedo, la ira, la envidia, la pena, el arrepentimiento, la avaricia, la arrogancia, la culpa, el resentimiento, la inferioridad, las mentiras, el falso orgullo, la superioridad y el ego. El otro lobo es la alegría, la paz, el amor, la esperanza, el compartir, la serenidad, la humildad, la amabilidad, la benevolencia, la amistad, la generosidad, la verdad y la fe.»
Interacciones con los lectores